Por ello hay que tener claro que ante la sospecha de una alergia o
intolerancia hay que acudir al médico de cabecera contarle lo que sucede y que
derive al especialista oportuno, quien pedirá más pruebas para la realización
de un estudio completo del paciente, con la finalidad de diagnosticar
correctamente a que alimento es intolerante o alérgico, ya que un diagnostico
precoz evita en un porcentaje muy alto sufrir alguna complicación debido a la
patología.
Así mismo hay que saber que no es lo mismo una intolerancia, la cual suele ser a hidratos de carbono como la lactosa, fructosa y se presenta con una
sintomatología digestiva como son
nauseas, vómitos, diarrea o por el contrario estreñimiento de varios días, la alergia se suele dar en alimentos concretos y consta de los mismos síntomas e incluso más graves ya
que puede darse problemas respiratorios,
dermatológicos e incluso un shock anafiláctico, poniendo en peligro la vida
del paciente,
Por ultimo Lujan hizo
hincapié en la celiaquía “la sociedad en
muchos casos no tiene claro lo que es ser celiaco, y es que la enfermedad celiaca es una reacción adversa
al gluten, de mecanismo autoinmune, no mediada por la IgE, sino que por las IgG
e IgA (Inmunoglobinas sanguíneas).
Las personas no toleran las proteínas (gluten) de
ciertos cereales, entre los síntomas, también están los digestivos, motivo
por el cual a veces es tan complejo el diagnóstico en el adulto, confundiéndose
con intolerancias alimentarias, enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa, y a
principio incluso con gastroenteritis, pero cuando este se repite varias veces
en un año, es cuando salta la alarma y se pasa a realizar otras pruebas.
Por ello se debe acudir a un
especialista, este pautará un tratamiento personalizado al paciente teniendo en
cuenta los síntomas, antecedentes, edad, sexo y estilo de vida, consiguiendo a
través del abordaje nutricional corregir por ejemplo la anemia ferropenia, la
anemia megaloblástica (déficit de Vitamina B), la hipercolesterolemia o el
déficit de vitamina D y C que tienen muchas de las personas que están aquejadas
de alergias o intolerancias alimentarias.
Tanto en las alergias como en
las intolerancias el tratamiento principal pasa por la dietoterapia, ya que, a
su juicio, es primordial estar bien asesorado
por un dietista-nutricionista”.
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