El 6 de octubre el hospital La
Paz (Madrid) dio una charla cargo de Silvia
Gómez Senent medica responsable
de la unidad de trastornos funcionales
digestivos del centro hospitalario junto a Sari Arponen especialista de medicina
interna en el hospital de Torrejón
de Ardoz, al evento acudieron numerosas personas interesadas en la
temática de la “microbiota como eje para
obtener un buen estado de salud, al igual que también se trato la
patología del síndrome intestino agujereado y la permeabilidad intestinal
aumentada, la cual esta relacionada con la EII
(Enfermedad Intestina Inflamatoria), celiaquía, cáncer de colon, problemas cariacos, enfermedades
hepáticas, ansiedad, obesidad e incluso con patologías neurodegenerativas como
el Parkinson y el Alzheimer.
Por ello la unidad de trastornos digestivos del hospital La Paz
atiende una media de 1.500 pacientes
anuales, dentro de un plan de atención psicológico y con un abordaje
multimedicinal, en el cual hay que estudiar los posibles desordenes digestivos
que el paciente puede presentar, y que estos sean clave para diagnosticar su
patología la cual no cuadra con las familia de patología esmeramente
digestivas.
Así entre las pruebas que se le realiza al paciente cuando llega a
este servicio, el cual junto con el apartado de medicina nuclear, la Paz es el
único centro de España donde cuentan con técnica para realizar los diagnósticos
mediante pruebas digestivas, como esta 1º que consiste en el test de la permeabilidad intestinal,
para ello se le administra al paciente un medicamento
de efecto radioactivo, disuelto en agua y este debe recoger la orina de las
siguientes 24 horas para analizarla, que de ser positivo significaría que el
radiofármaco atravesó la pared intestinal y se elimino por el pis lo que se
traduce en que hay sospecha de alguna enfermedad relacionada con alguno de los microorganismos
del cuerpo, los cuales tienen un numero 10 veces superior al de las células y
en conjunto pesan unos 2 kilos, siendo un 50% de lo que desechamos mediante el
sudor, pis y las heces.
Por ello cuando se produce un desequilibrio metabólico hay que estudiar que no tenga
relación con la disbiosis, ya que
esta provoca numerosas alteraciones intestinales, como psicológicas,
produciendo síntomas de diversas índoles, debido a que las sustancias dañinas del organismo son absorbidas por la sangre debido
al colarse por pequeñísimos agujeros presentes en el aparato digestivo, entre
sus síntomas cabe destacar que se encuentran las
flatulencias, lengua blanca, intolerancias o alergias alimentarias,
estreñimiento, picores frecuentes en los ojos, nariz, agitación y nerviosismo, dolores en las
articulaciones, pérdidas ocasionales de memoria (especialmente de la memoria
próxima), migrañas, problemas para conciliar el sueño, inflamaciones de vejiga,
próstata, infecciones de orina de
repetición, etc. Y su tratamiento seria principalmente seguimiento medico, un control psicológico para ver donde esta el
causante de esta patología, la cual suele aparecer durante o después de un
fuerte cuadro de estrés duradero de la persona, y una dieta rica en
probioticos, lactobacilus y
bifidobacterias, que se encuentran en
los yogures, queso, el kéfir, el
chucrut, el chocolate negro, algunas microalgas (espirulina y clorela), la sopa
de miso, los pepinillos encurtidos, el tempeh y el kimchi.
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