Ana González es una vecina
de Córdoba afectada por el síndrome post polio ha llevado a cabo una petición
para que dimita la delegada de salud de Córdoba
María de los Ángeles Luna, para conseguirlo cuenta con el apoyo de la Red de Madres y Padres Solidarios (REMPS)
Y de la Federación de Enfermedades Raras
(CRAER), ya que la delegada muestra
una dejadez total de sus funciones en la accesibilidad de los edificios de la administración,
por lo que debe dejar su puesto, ya sea mediante la dimisión por la presión
ciudadana o bien como le pasaría a cualquier otro trabajador que no cumpla con
su proyecto se le echaría de la empresa.
Un ejemplo de ello es la Delegación
Territorial de Salud en dicha localidad donde acudió Ana el 17 de agosto a
presentar el escrito que la pedían para llevar a cabo la resolución sobre su
grado de dependencia y sin embargo por ir en silla de ruedas no ha podido
acceder al edificio debido a que no
cuentan con puertas automáticas y si con unas que una persona con movilidad
reducida no podría abrirlas nunca solo, por lo que una funcionaria la
tenido que ayudar a acceder.
Por su parte Rosa García presidenta de la REMPS indican que esta situación la denunciaron como colectivo hace
más de 4 meses que esta delegación es inaccesible para personas con
diversidad funcional.
Aunque en su defensa siempre contestan que el edificio cuenta con un
acceso secundario donde se encuentran 3 puertas
para acceder a ello, aunque reconocen que solo una está al nivel de la
acera facilitando el paso a las personas en silla de ruedas, pero sin embargo
la realidad es que ninguna de las 3
cuenta con una apertura de puertas automática y todas cuentan con un mecanismo
que una persona en silla de ruedas, con movilidad reducida o problemas en las
manos no pueden abrirlo por si solos.
Además Ana recordó que María de los Ángeles Luna siempre ha responsabilizado al ayuntamiento
de estos problemas de accesibilidad en su delegación, pero sin embargo el
consistorio atendió la reclamación de la REMPS y por su parte la junta siempre ha
hecho y sigue haciéndoles caso omiso.
Y por último la Remps ha
indicado que el ayuntamiento ha hecho intención
de atender sus reclamaciones ya que a los pocos días de presentar la queja, han
retirado una señal de tráfico que estaba colocada en la acera dificultando el paso
por ella en silla de ruedas y están
redactando un proyecto de obra para remodelar la acera y eliminar las escaleras
o escalones que impiden el paso de personas con silla de ruedas.
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