José Antonio Arbiza Fernández es un vecino de Oviedo que
está en silla de ruedas, por lo que moverse en trasporte
público no le es nada fácil debido a las barreras arquitectónicas que
encuentra, un ejemplo de ello es Renfe en especial en la línea
que cubre el trayecto Oviedo- El Entrego, que hace parada
en Langreo localidad que visita a menudo para llevar a cabo
gestiones y ver a amigos o antiguo vecinos ya que durante años vivió allí.
Por lo que cada vez que tiene la necesidad de viajar de Oviedo a
Langreo lo teme, ya que si no le ayudan el solo no puede acceder al
vagón debido a la falta de accesibilidad, hecho que le ha llevado a
ponerse en contacto con Jesús Sánchez alcalde de Langreo para
explicarle su situación, aunque este todavía no le ha dado ninguna respuesta,
por ello José no descarta recurrir a donde haga falta para que le ayuden a encontrar
una solución y poder ser independiente a la hora de acceder y salir del tren.
Aunque no solo es en Renfe, ya que en ocasiones ha intentado moverse
en bus con líneas que cubren Langreo con Pola de
Laviana pero ha tenido el mismo problema, ya que los buses
no cuentan con una rampa para que estas personas puedan acceder al
interior con total libertad, al igual que ocurre en los que conectan Oviedo con
Pola de Laviana que tampoco cuentan con facilidades para este
colectivo, por ello siempre debe pedir ayuda a los viajeros para poder entrar o
salir, pero como bien resalta “Esto no debería de ocurrir, alguien se
tendría que responsabilizar de ello y hacer algo para mejorar la situación”.
Por ello muchas veces piensa en desplazarse en taxis pero
le frena que este tiene un precio más elevado y que tampoco hay muchos
taxis adaptados, de echo esto son una minoría.
Por lo que le gustaría hacer un llamamiento a que alguien se
haga cargo de eliminar las barreras arquitectónicas con las que se
encuentra una persona en su vida diaria en silla de ruedas sobre todo en
los trenes y autobuses, al igual que también ve necesario que se adecuen
las entradas de todos los establecimientos que cuenten con alguna
barrera arquitectónica, así como las calles ya que en algunas es
necesario bajar unos escalones para ir al paso de cebra.
Por ultimo resalto que "Nos encontramos con muchos problemas
en el día a día", y espera que estas quejas no caigan en el
olvido y sirvan para que alguien con competencias le escuche y pueda apórtales
soluciones haciendo que sus viajes de Oviedo a Langreo sean agradables ya que
entonces no se tendría que preocupar de obstáculos, pues estos habrían dejado
de existir.
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