Durante esta semana la fundación Irene Villa va a llevar a cabo por tercer año la
actividad Flor Dulce de Navidad,
para ello contara con un grupo de personas con discapacidad que ayudaran su elaboración, decoración y empaquetado.
En Asturias la actividad se llevó a cabo el 15 de
Diciembre en el gremio de Artesanos Confiteros de Asturias de Oviedo, se contó
con la colaboración de la asociación Alarde junto a varios voluntarios del Instituto
Técnico de Pastelería y Panadería Asturiana (ITPPA), así para su distribución participo
Distribuciones Ángel Díaz, Cartonajes Muñoz, Carrefour, Paper&Co y Colegio
La Asunción y se pudo encontrar el 16 y 17 de Diciembre en los establecimientos
de Carrefour Los fresnos de Gijón, Azabache en Lugones, Carrefour Oviedo y
en el Gremio de Artesanos Confiteros de
Asturias.
Y en Madrid
se llevara a cabo del 20 al 23 de Diciembre en la Ciudad de la raqueta (Calle Monasterio de El Paular, 2,
Montecarmelo), está previsto que
participen en su creación la fundación
de Síndrome Down Madrid junto a voluntarios de la fundación Irene Villa, y
al igual que en Asturias se cuenta para
su distribución con Cartonajes Muñoz, Distribuciones Ángel Díaz, Carrefour, Air
Europa y la Ciudad de la Raqueta.
Se podrán encontrar
esos días en Carrefour de Aluche, Majadahonda, Alcobendas y hortalizas, en Carrefour Market de Quevedo y Conde de
Peñalver, en la Pastelería Vait de
Moraleja Green, Sexta Avenida, Gran Plaza, Castellana 200 y Clara del Rey, en todas las tiendas Vips de Madrid, en la
Pastelería Harina de Plaza de la
Independencia 10, Augusto Figueroa 2, Corte
Inglés de la Castellana, Gran Vía y Goya , por último en Viena Capellanes de Calle Génova 4,
Bravo Murillo 365 y Paseo del Molino 6.
El precio
de cada flor de navidad que es un bollo relleno de cacahuetes con miel, pasas y
decorado con compota de manzana, con un peso de 350 gramos por unidad, será de 10 € y es recomendable encargarlo en el
email contacto@fundacionirenevilla.org.
Esta iniciativa pretende contribuir a la formación
de personas con discapacidad para su inserción laboral, por lo que Irene Villa
subrayo que "Con la venta de este
dulce tratamos de impulsar que la gente sea responsable con los que más
necesitan, además de intentar poner nuestro grano de arena para ayudar a
integrar socialmente al colectivo de las personas con discapacidad y contribuir
a hacer un mundo mejor".
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